Todos tenemos una historia con un punto de vista único, solo que a veces no sabemos cómo descubrirla
Por eso, hay momentos en los que nos frustramos y terminamos pensando que nuestras vivencias, ideas, conocimientos y gustos son tan eclécticos que no hay hilo conductor posible, que no tienen valor suficiente o que no sirven para construir un proyecto sólido.
Sin embargo, el impulso por crear y expresar una especie de intuición, persiste.
Si no creamos, nos marchitamos.
Pero ¿cómo salir de la duda?, ¿cómo crear a pesar de la incertidumbre?, ¿cómo construir sin un manual de instrucciones?
Tu voz, tu discurso y tu punto de vista están contenidos en tu propio imaginario gastro
Explorar ese imaginario es un proceso fascinante y enriquecedor, sin embargo puede convertirse en una trampa.
Y es que explorar es divertido, pero también puede llevarnos a dormirnos en los laureles con la ilusión de estar avanzando o a perdernos entre sus infinitos senderos sin llegar a materializar ninguna idea.
Por eso, si lo que buscamos es dar forma a nuestras intuiciones y materializarlas en un proyecto concreto: ya sea nuestra marca gastro, una línea de investigación, una temática para una newsletter… la exploración del propio imaginario debe tener cierta estructura, cierto orden, para no perdernos.
Explora tu propio imaginario gastronómico con un propósito: descubrir tu punto de vista y tu discurso
Mediante los contenidos que encontrarás en la Pepaletter puedes empezar a adentrarte en la exploración de tu propio imaginario por ti misma.
Te propongo 3 ejes temáticos:
1) Tu práctica narrativa
Incorporando la práctica narrativa a tu rutina creativa (o empezar a construir una rutina creativa gracias a la práctica narrativa):
2) Tu mitología creativa
Cartografiando los componentes de tu propia mitología para encontrar tu discurso y tus valores.
3) Storytelling gastronómico
Aterrizando tus descubrimientos en creaciones concretas gracias a la herramienta del storytelling gastronómico.
Y es que, ante todo, se trata de ir construyendo tu propio camino a tu ritmo: respetando tus tiempos y teniendo en cuenta tu contexto.
Es por eso que cada Pepaletter siempre termina con la misma frase:
El camino sigue. 💛